Mito: Dirigir a las Personas hacia el Sistema de Iglesia Celular Es Similar que Dirigirlas hacia Otros programas de la Iglesia

Liderazgo Pastoral

por Joel Comiskey

2011

Este articulo viene de Mitos y Verdades de la Iglesia Celular: Principios Claves que Construyen o Destruyen un Ministerio Celular

Mito: Dirigir a las Personas hacia el Sistema de Iglesia Celular Es Similar que Dirigirlas hacia Otros programas de la Iglesia

La mayoría de pastores tienen experiencia iniciando nuevos programas tales como AWANA, Explosión Evangelista, Vacación de Escuela Bíblica, o algún nuevo programa de su denominación.

Los programas normalmente tienen un ciclo de vida determinado el cual puede ser descontinuado después de un semestre, un año, o cuando la iglesia decida cambiar de programa. Muchos pastores enfocan el inicio de su ministerio de iglesia celular de una manera programática. Quieren sacarlo de una caja, armarlo, y luego delegar a otros que lo hagan funcionar.

Visualizan la estrategia de iglesia celular como una técnica o programa que puede ser utilizado por algún tiempo para luego ser descontinuado.

Verdad: Dirigir una Iglesia Celular Requiere un Tipo de Liderazgo Diferente

La iglesia celular no es otro programa. Por el contrario, se enfoca en las personas. Antes de iniciar el recorrido dentro de la vida celular, los pastores deben considerar los nuevos desafíos que esta estrategia traerá sobre la forma cómo dirigen su iglesia.

Curva Escarpada de Aprendizaje

La mayoría de pastores han sido capacitados en seminarios que enseñan el modelo tradicional del pastor asalariado que realiza el trabajo del ministerio. No es fácil para los pastores y las congregaciones preparar laicos para trabajar en el ministerio y luego supervisarlos para asegurarse que cumplan con su ministerio pastoral.

Trabajo Extra Requerido para Capacitar y Supervisar Líderes

La iglesia celular solicita de los líderes potenciales una capacitación específica. De hecho, todos los miembros son animados a tomar la capacitación. Aquellos que se convierten en líderes de células (o que forman parte del equipo de liderazgo) necesitan supervisión continua. Los pastores necesitan estar conscientes de esto y medir el costo para asegurarse que la capacitación y la supervisión siempre tome lugar.

Mala Interpretación de parte de Personas que tienen otros intereses

Cuando una iglesia avanza hacia una visión, siempre habrá personas que la ataquen. Siempre que un líder vaya en alguna dirección en particular y les pida a las personas que lo sigan, algunos se resistirán, prefiriendo ir en otra dirección o manteniendo las cosas como están.

Encontrando Líderes que Estarán en el Mismo Sentir

Una cosa es que el Líder principal esté abordo, pero también es crucial que cada miembro del equipo de liderazgo apoye la visión. Cuando esto sucede, un equipo puede avanzar junto. La iglesia celular en realidad es todo sobre el desarrollo del liderazgo, y el equipo de liderazgo es el timón de la iglesia celular. Si el equipo de liderazgo está unido y dirigiendo la visión de la iglesia celular, existe una gran posibilidad que el resto de la iglesia los siga.

Perdiendo gente

Richard Houle capturó la visión de hacer la transición de su iglesia Bautista convencional Franco-parlante en Granby, Quebec hacia la visión de la iglesia celular. Él creyó en la teología detrás de la estrategia celular y se dio cuenta que la nueva dirección requería compromiso y cambio. En el proceso sesenta personas abandonaron la iglesia. Houle continuó insistiendo en obediencia al llamado de Dios.

Al pasar de los años, la iglesia alcanzó a nuevas personas y comenzó a dar fruto. Al final se convirtieron en un movimiento plantador de iglesias celulares, con cuatro iglesias filiales conectadas a la iglesia madre. Cuando los visité en el 2009, me emocionó ver el rol apostólico de Richard Houle sobre las cuatro iglesias filiales, y especialmente cómo el ejemplo de Houle había impactado positivamente y por completo a su denominación Bautista. Un gran número de líderes de denominaciones Bautistas vinieron a mi seminario sobre células, debido a su relación con Richard Houle y su congregación Franco-parlante.

Ramón Justamente es un pastor Bautista, sureño, radicado en Florida. Él cuantificó el costo de convertirse en una iglesia celular por medio del estudio de la literatura, y mediante las visitas a varias iglesias celulares (él y su esposa hasta visitaron nuestra iglesia en Quito, Ecuador en 1999). Él estaba totalmente convencido que debía hacer la transición con su iglesia.

Creo que Ramón no estaba listo para lo que ocurriría posteriormente: cuatrocientas personas abandonaron la iglesia. No obstante, Ramón creía que Dios lo había llamado al ministerio de la iglesia celular y no iba a retroceder.

Diez años después de la transición al sostener un seminario en su iglesia, pude observar una vibrante iglesia celular. Dios no sólo ganó más de los cuatrocientos que se fueron, sino que las personas que estaban ahora en la iglesia se hallaban emocionadas, motivadas, y sirviendo a Jesús con celo y pasión. Yo hablé sobre cómo se debe hacer la transición de una iglesia, y Ramón dio su testimonio.

Si Ramón sólo hubiera estado “probando las aguas” sólo hubiera durado unos cuantos meses. Su compromiso con la visión y los valores del ministerio de la iglesia celular le ayudaron a “aclimatarse” a las fuertes tormentas y a estar a flote cuando las cosas se tornaron duras. La iglesia de Ramón es ahora un gran modelo para aquellos que están haciendo ministerio celular en Florida.

Ambos Houle y Justamente, no podían prever todos los obstáculos, pero estaban convencidos del fundamento bíblico del ministerio celular. Nunca vieron el ministerio celular como una técnica que se podía descartar si no funcionaba. Por el contrario lo vieron como una manera bíblica de vida.

En el libro The Challenge of the Cell Church (El Desafío de la Iglesia Celular), Phil Potter detalla su propio recorrido en la transición de una iglesia Anglicana tradicional en Inglaterra, hacia el modelo de iglesia celular. Potter condujo a su congregación a comprender el costo imbíbito antes de apresurarse hacia el ministerio celular. Se pasaron meses en la planificación y preparación para la transición. Dado que fielmente determinó cuál sería el costo, Potter pudo iniciar células que continuaron creciendo y multiplicándose.

Phil Potter ejemplifica la necesidad de planificación cuidadosa y de cuantificar los costos antes de sumergirse dentro del ministerio celular. Jesús animó a hacer una planificación similar cuando desafió a las personas a valorar el precio por seguirle. El advirtió a las multitudes del peligro de comenzar y no terminar algo (San Lucas 14).

La iglesia celular no es un programa. Los pastores que exitosamente han plantado o han hecho la transición al modelo de iglesia celular han hecho su tarea y están listos para permanecer allí a largo plazo.