Por Joel Comiskey, Viviendo en Victoria: 9 Verdades Espirituales para la Transformación y la Renovación
Tengo el privilegio de hablar ante multitudes de todo el mundo. Las personas que conozco en esos eventos no me conocen personalmente. Tal vez hayan leído uno de mis libros y, con suerte, les he dado una buena impresión al hablar. Sin embargo, no conocen mi verdadero yo y, yo no los conozco ellos. Podemos escondernos de la multitud, podemos decir lo suficiente para que parezcamos “reales”, pero demasiado poco para ser verdaderamente vulnerables.
Mi esposa y mi familia, sin embargo, me conocen íntimamente. Ellos ven a Joel Comiskey de cerca y saben cuán exitosamente mi fe se traduce en el día a día de la vida. Son testigos de cómo trato con las circunstancias de la vida real y si estoy llevando una vida cristiana, en lugar de simplemente hablar de ella. Las palabras pasan a un segundo plano ante la acción y el estilo de vida. Saben cómo actúo y quién soy.
La obra de la gracia de Dios comienza con el círculo interno. En ese círculo, recibimos críticas, verdadero aliento y hacemos correcciones a mitad del camino. A medida que pasamos la prueba del círculo interno, Dios puede entonces usarnos en mayores esferas de influencia.
Dios no está interesado en el éxito público sin la victoria privada, Los dos son caminos inseparables. De hecho, Cristo dio prioridad a enseñar a doce discípulos durante tres años para que luego pudieran pasar la prueba de la multitud. Quería que esos pocos aplicaran con éxito sus palabras en la vida y la acción diarias. Al concentrarse en ellos, Jesús eventualmente llegaría a más y más personas. Pero primero necesitaba centrarse en la calidad. La calidad traería la cantidad.
John Maxwell, famoso autor y maestro, escribió: “El éxito significa que las personas más cercanas a mí sean las me amen y me respeten más”.
Esto hizo posible el éxito para él solo si incluía a su esposa e hijos en el viaje. El éxito de Maxwell dependía de poner a la familia primero. Maxwell se dio cuenta de que para tener éxito en esta vida, necesitaba acercarse a las personas más importantes de su vida.
En JCG normalmente se escribe sobre el ministerio de grupos pequeños en la iglesia. Sin embargo, los líderes de grupos pequeños y los pastores no tienen éxito a largo plazo a menos que prioricen a los más cercanos a ellos. Si un líder es soltero, las personas más cercanas a él pueden ser sus padres o amigos cercanos.
Dar prioridad a esas relaciones íntimas ayudará al líder a ser fructífero a largo plazo. Es claro que, se necesita aplicar mucha gracia aquí, ya que los niños tienen ideas propias y los matrimonios rara vez son perfectos.
Para el mes de agosto, publicaremos 25 blogs sobre cómo priorizar a las personas más cercanas a nosotros. Si deseas registrarte para recibir estos blogs en tu correo electrónico, haz clic aquí. Cubriremos:
- 07-13 de agosto: Jesús y Pablo destacan la importancia de la relación matrimonial. Pablo compara el matrimonio con Cristo y la iglesia (Efesios 5-6) y 1 Timoteo 3:5 les dice a los ministros que den prioridad a los niños como campo de entrenamiento para el ministerio.
- 14-20 de agosto: El cónyuge de un líder es una parte íntima de su ministerio. Dedicar tiempo a desarrollar el matrimonio es una parte esencial de la eficacia y el fruto del liderazgo.
- 21-27 de agosto: Los hijos. Los líderes deben priorizar a sus hijos, cuidando su vida espiritual tanto como sea posible. El hogar es una maravillosa oportunidad para priorizar la vida cristiana y eso es algo que Dios espera.
- 28 de agosto al 02 de septiembre: Amistades cercanas. No podemos ser amigos de todos, pero podemos priorizar la amistad con unos pocos. Se aplica el mismo principio: éxito con aquellos más cercanos a nosotros.