by Mario Vega
When a church has thousands of members, the counseling ministry can not follow the traditional model of a few pastors counseling each one of the members. It wouldn’t take long to discover that needs weren’t being met and that new measures would have to be implmented. At Elim, we work under the Jethro Model. I’m not just talking about structure. I’m talking about the core essence of Jethro’s counsel: that each person receives adequate attention. In our system, each leader is responsible for providing counseling to his or her cell members. When a case exceeds the leader’s advising ability or if the leader doesn’t know what to do, the leader transfers the case to the supervisor.
If the supervisor feels that his counseling ability has been exceeded, he transfers the case to the Zone Pastor. Normally, most cases are solved at this level. However, there are situations that are still too complicated or require more specialized help process. In this scenario, the Zone Pastor refers these difficult cases to the District Pastor or directly to me.
The model is not overly rigid. A person can go directly to his Zone Pastor and be cared for. Obviously, many would want to be ministered to by the Senior Pastor, but most people at our church were born again within the Jethro model and thus it’s very normal for them to follow the step by step process.
Without the Jethro model, it would be impossible to truly minister to every case—even if each day was devoted to counseling.
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Mario
Consejera en una iglesia celular.
Cuando una iglesia posee miles de miembros el tema de la consejera no puede seguir el modelo tradicional de un pastor aconsejando a cada uno de ellos. Pronto se percibirá que se deben adoptar medidas mucho más amplias para cubrir la necesidad de consejera.
En nuestro caso, trabajamos con el modelo Jetro. No solamente en el sentido de la estructura sino más en el sentido esencial del consejo de Jetro: la atención adecuada.
Cada lder es responsable por ofrecer consejera a los miembros de su célula. Cuando un caso sobrepasa la capacidad de asesora del lder o no está seguro del camino que se debe seguir, traslada el caso al supervisor.
En caso que el supervisor se sienta rebasado en su capacidad de consejero, traslada el caso al Pastor de Zona. Normalmente, es en éste nivel donde se resuelven casi todos los casos. No obstante, hay situaciones que a veces se vuelven muy complicadas o requieren un proceso más especializado de ayuda. El Pastor de Zona suele remitir esos casos difciles al Pastor de Distrito o directamente a m.
El modelo no es excesivamente rgido. Una persona puede ir directamente a su Pastor de Zona y ser atendida. Obviamente, muchos quisieran ser atendidos por el Pastor Principal. Pero, la mayor parte de personas han nacido dentro de el modelo Jetro y para ellos es normal el ser ayudados de la manera que se ha explicado. De otra forma sera imposible atender cada caso aunque se dedicara todo el da a ello.
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