by Joel Comiskey
We’ve looked at the positive aspects of Encounter Retreats but what about the dangerous side? One key danger that we’ve already mentioned is straying from the Word of God and entering into strange psychological regression based on emotion rather than Scripture. Encounters are not a secret, magical, gnostic experience in which the person receives a secret formula that perfects him or her forever. We must remember that the process of sanctification is for a life-time. We won’t be perfect this side of heaven. Apart from the danger of straying from Scripture, allow me to mention two more potential problems:
1. Placing too much hope that an Encounter will forever change someone.
Sometimes we put too much stock on “Encounter type” experiences but forget that the Christian life is lived daily, weekly, monthly, yearly and over a lifetime. In my book An Appointment with the KingI wrote the following:
God has granted me the opportunity to study and visit some of the largest churches in the world. One phenomenon I’ve noticed in many of these churches is the growing interest in weekend retreats, often called Encounter with God retreats. The purpose of these retreats is to break the bondages and strongholds of sin in a person’s life so that he or she can walk in spiritual freedom.
When I attended my first Encounter retreat, God worked powerfully and I confessed strongholds of bitterness and anger, as well as other sins. God transformed my life, and I experienced an incredible new freedom and liberty.
Yet, as the months passed, I noticed that I still struggled in some of these areas. I realized that in order to remain free, I needed to approach God on a daily basis, confessing any reoccurring sin. God showed me that I needed the strength of my daily quiet time to walk in continual victory.
Camps and retreats are great. God uses them to speak to us clearly and powerfully. But there’s a danger in living today on a yesterday’s one-time experience. We need to walk in daily repentance.
I believe the daily Christian walk of sanctification (e.g., personal devotions, walking in the Spirit, etc.) is far more important than the occasional jump-start of a retreat.
2. Over-emphasizing the Encounter to the detriment of the other parts of the equipping process (training track)
I’ve seen this happen in cell churches. They became so excited about the Encounter Retreat that they forgot that the Encounter is simply one step in the Equipping process. They become stuck on Encounters and fail to get the people through the rest of the training and into cell leadership. One church got so excited about the Encounters that their main Sunday announcement was getting people into the Encounters. The church’s effort and resources became absorbed into paying for Encounter Retreats, recruiting people to attend, and then advertising what happened. I noticed that the cell structure began to weaken and go backwards instead of forward.
Remember that Encounters are simply one link in the chain, one part of the cell system. The goal is to make disciples who make disciples through the cell system–of which the Encounter Retreat is just one part. What has been your experience in balancing Encounters with the rest of the cell system?
Joel
Spanish blog:
Más Alla de Encuentros
por Joel Comiskey
Hemos visto los aspectos positivos de los Retiros Espirituales, pero ¿qué pasa con el lado peligroso? Uno de los peligros clave que ya hemos mencionado es apartarse de la Palabra de Dios y entrar en una regresión psicológica extraña, basada en la emoción en lugar que en las Escrituras. Los encuentros no son un secreto, una experiencia mágica, una experiencia gnóstica en el que la persona recibe una fórmula secreta la cual perfecciona a él o ella para siempre. Debemos recordar que el proceso de santificación es para toda una vida. No vamos a ser perfectos este lado del cielo. Separados del peligro de apartarse de las Escrituras, me permito mencionar dos problemas potenciales:
1. Poner demasiada esperanza de que un Encuentro cambiará a alguien para siempre.
A veces ponemos demasiada acción en las experiencias de un “Tipo de Encuentro” pero se olvidan que la vida cristiana se vive diariamente, semanalmente, mensualmente, anualmente y durante toda la vida. En mi libro, Una Cita con el Rey, escrib lo siguiente:
Dios me ha dado la oportunidad de estudiar y visitar algunas de las iglesias más grandes del mundo. Un fenómeno que he notado en muchas de estas iglesias es el gran interés en los retiros de fin de semana, a menudo llamado Encuentros espirituales con Dios. El propósito de estos retiros es romper las ataduras y fortalezas del pecado en la vida de una persona para que él o ella puedan caminar en libertad espiritual.
Cuando asist a mi primer Encuentro espiritual, Dios obró poderosamente y le confesé fortalezas de amargura y enojo, as como otros pecados. Dios transformó mi vida, y experimenté una increble libertad.
Sin embargo, conforme pasaban los meses, me di cuenta de que todava luchaba en algunas de estas áreas. Me di cuenta que para seguir siendo libre, tena que acercarme a Dios a diario, confesando cualquier pecado recurrente. Dios me mostró que necesitaba la fuerza de mi tiempo diario para caminar en una continua victoria.
Los Campamentos y retiros son buenos. Dios los usa para hablarnos claramente y con poder. Pero hay un peligro en vivir hoy una experiencia que paso ayer. Tenemos que caminar en un arrepentimiento diario.
Yo creo que el cristiano diario camina a la santificación (por ejemplo, devociones personales, caminando en el Espritu, etc.) es mucho más importante que el salto ocasional a un Retiro.
2. El exceso de énfasis en el Encuentro, y el daño de las otras partes del proceso de equipamiento (pista de entrenamiento)
He visto que esto sucede en las iglesias celulares. Se emocionan tanto con el Retiro de Encuentro que se olvidan de que el encuentro es solo un paso en el proceso de equipamiento. Se quedan atascados en Encuentros y fallan en conseguir la gente para el entrenamiento y en el liderazgo celular. Una iglesia estaba tan emocionado con el Encuentro que su principal anuncio del domingo fue hacer que la gente se anotara al Encuentros. El esfuerzo de la iglesia y los recursos fueron absorbidos en el pago del Retiro de Encuentro, reclutando personas para asistir, y después haciendo propagando de lo que pasó. Me di cuenta de que la estructura de la célula comenzó a debilitarse y retroceder en lugar de avanzar.
Recuerde que los encuentros son simplemente un eslabón de la cadena, una parte del sistema celular. El objetivo es hacer discpulos que hacen discpulos a través del sistema celular – de los cuales el Retiro espiritual es sólo una parte. ¿Cuál ha sido tu experiencia en dar equilibrio a los Encuentros con el resto del sistema celular?
Joel
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